INSPECTORES DE TRÁNSITO SUFRIERON AGRESIONES VERBALES Y FÍSICAS CUANDO REALIZABAN UN CONTROL

La Municipalidad de Ushuaia repudió las agresiones verbales y físicas que sufrió un grupo de inspectores de tránsito durante un control vehicular, y los daños a un móvil del área. Una inspectora debió ser atendida en el Hospital Regional, y tras el hecho se radicó la denuncia penal correspondiente.

El incidente sucedió ayer miércoles luego de que personal de tránsito incautara una moto, ya que el conductor no tenía licencia de conducir ni los papeles del vehículo.

El coordinador de Tránsito y Transporte de la Municipalidad, Horacio Herrera, detalló que «en un control de rutina en calle Monseñor Scriva al 1700, intersección con Darwin, se procedió a incautar una moto ya que el conductor no tenía licencia habilitante ni la documentación del vehículo».

«Luego de labrarse el acta se pidió la grúa para que retire la moto hacia el playón, y el conductor decidió irse del lugar», amplió el funcionario, pero minutos después el conductor «regresó junto a un grupo de unas 10 personas, algunas de ellas con cascos en los codos, y los inspectores con buen criterio se subieron al móvil» previendo la agresión.

Herrera contó que «insultaron, patearon el móvil y rompieron la luneta trasera con una piedra muy grande, por lo que dentro del habitáculo quedaron fragmentos de vidrio y una inspectora sufrió lesiones en el oído por las que fue atendida en el hospital, donde diagnosticaron que no eran de gravedad».

«Luego de haber concurrido al hospital y ver que la salud de los inspectores era buena se trasladaron a la Comisaría Primera para hacer la denuncia correspondiente. Tenemos los datos del infractor, de hecho dialogó con los inspectores y en ningún momento hubo agresiones, pero luego se juntaron más personas y entonces los agredieron. Y uno de los agresores fue la persona a la que se le hizo la infracción», continuó.

El coordinador de Tránsito y Transporte advirtió que «cada vez vemos más agresiones, lamentablemente los inspectores siempre las sufren pero no de esta magnitud; es un hecho que repudiamos, la sociedad está intolerante y se la agarra con personas que están cumpliendo su función».

«Cada vez que disponemos de un operativo programado contamos con Defensa Civil, Prefectura Naval, Policía provincial. En este caso era un control de rutina, el móvil estaba circulando, vieron pasar el vehículo, solicitaron la documentación y sucedió todo esto», enfatizó.

Finalmente, Herrera observó que «la sociedad cambió mucho, hay mucha agresividad y la gente está intolerante; nuestros inspectores están acostumbrados a la agresión verbal pero no a la física».